lunes, 4 de octubre de 2010

7.- VILLA CARMEN - GORDEXOLA

Villa Carmen es en la actualidad el Ayuntamiento de la localidad encartada de Gordexola. El edificio fue construido en 1.884 para José Arechabala Aldama, natural de la misma localidad, que emigró a Cuba en 1.862 con quince años. Comenzó en la isla caribeña como panadero y tras diversos trabajos en 1.878 puso a funcionar un alambique para destilar ron y aguardiente en Cárdenas, provincia cubana de Matanzas. Inicialmente la destilería se llamo La Vizcaína teniendo un logotipo muy similar al escudo de Vizcaya. Pronto se convertiría en una de las mayores destilerías de la isla, con una producción de ron de la mejor calidad. Pero el negocio de los Arechabala no se quedó en los rones y aguardientes, sino que se diversificó con inteligencia y se trasformó en un emporio industrial que llegó a contar con una terminal marítima de embarque de sus productos, líneas de travesía y cabotaje, astilleros, plantas de petróleo, refinería de azúcar y mieles, fábricas de dulces y confituras. Como curiosidad y al hilo de esto último, al vizcaíno se le ocurrió hacer un tipo de caramelo en forma cónica y alargada con un palito para agarrarlo, de esa forma inventó el caramelo con palito y nació el famoso pirulí. En 1.935 empezó a comercializar ron con la marca Havana Club, hasta que en 1.960 la revolución cubana se hizo con el negocio. Además de Havana Club, su empresa elaboraba el Brandy Relicario, Cremas Arechabala, Vermouth Quirinal, Coñac Arechabala y hasta combustibles. Habían conformado un imperio muy similar al de los catalanes de Bacardí, que sí fueron capaces de recuperarse tras el destierro obligado por Fidel Castro.
En 1.939 nacía la revista Gordejuela de Cárdenas, respondiendo a los intereses de la poderosa destilería José Arechavala Sociedad Anónima. De aparición semanal, esta revista tenía una calidad poco común para la época, con abundante material fotográfico que hacía hincapié en las modernas instalaciones de la empresa y en la vida social de sus propietarios y empleados. Distribuida entre los trabajadores, estuvo dedicada a promocionar la empresa familiar fomentando la buena convivencia entre ésta, sus trabajadores y el pueblo de Cárdenas.
José Arechavala Aldama se casó con Carmen Hurtado de Mendoza, siendo padres de cinco hijos: Juana, Carmela, José Antonio “Toto”, Mercedes y José Nicolás “Pepucho”. D. José murió en 1.923, con 76 años de edad y su esposa Carmen en 1.919, con 64. Sus restos mortales, al igual que, posteriormente, los de sus hijos, fueron traídos a Gordexola y sepultados en el panteón familiar.
Como anécdotas curiosas decir que su tercer hijo José Antonio tras un primer matrimonio fracasado, se enamoró de la famosa cupletista “Nati, La Bilbainita”; amor desgraciado ya que Nati y el hijo de ambos murieron en un mal parto. Los restos mortales de Natividad Álvarez reposan también en el panteón familiar.
Carmelina Arechabala, nieta de D. José, nació entre la riqueza de la familia y creció sin dificultades económicas que le garantizaron tener el mundo de su época a sus pies, por lo que entre los antiguos habitantes de Cárdenas se extendió el refrán "Vivir como Carmelina".
Otra nieta, Ignacia Gloria se casó con el torero Antonio Márquez, más conocido como “El Belmonte Rubio”, el matador acabaría abandonando a su esposa para ser la pareja de Doña Concha Piquer.